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Un par de destellos plateados con inscripciones enigmáticas bastaron para encender la curiosidad en el universo digital de Pedro Astorga y Michelle Carvalho. La fotografía compartida, donde ambos lucen anillos idénticos, se convirtió en la comidilla de sus seguidores, reabriendo el libro de las especulaciones sobre la naturaleza de su vínculo.
La memoria colectiva de los fans desempolvó un recuerdo televisivo: la promesa de un anillo como símbolo de una amistad forjada hace trece años, un pacto sellado en el crisol de un reality show. «Pedro cumplió la promesa que le hizo a Michelle en GH, con el anillo que simboliza los 13 años de amistad», resonó en los comentarios, intentando anclar la joya en el terreno de la camaradería.
A pesar de que Pedro y Michelle han insistido en que su relación se mantiene en el plano de la amistad, la fotografía de los anillos no hizo más que generar distintas reacciones entre sus seguidores, algunos esperanzados por el romance y otros en con frustración.
