Uno de los denunciantes del caso Karadima vivió una situación inesperada en un programa de televisión en España.
Fue presentado con la frase: «Él es el amigo gay del Papa Francisco», lo que causó incomodidad inmediata.
«Fue un momento tenso y fuera de lugar», dijo luego en declaraciones públicas.El panel del programa quedó en silencio tras la introducción del conductor.
El hecho ocurrió durante una entrevista en la que el chileno compartía su experiencia como víctima de abusos.La etiqueta usada causó indignación en redes sociales y generó un debate sobre el respeto en los medios. «No soy el amigo gay del Papa, soy una víctima que lucha por justicia», aclaró posteriormente. El canal no ha pedido disculpas públicas, aumentando la polémica.
El momento ha sido ampliamente comentado en círculos de defensa de los derechos humanos.Varios activistas denunciaron la banalización del sufrimiento de las víctimas.El caso volvió a poner en discusión el tratamiento mediático de temas de abuso e Iglesia. El entrevistado exigió respeto y una disculpa formal por lo ocurrido.