En el Aeropuerto Nuevo Pudahuel, una disputa entre dos taxistas escaló a niveles inesperados y terminó en manos de la justicia. Todo comenzó en noviembre de 2024, cuando uno de los conductores denunció ser víctima de «hostigamientos» por parte de la directiva de su asociación gremial. En medio de este conflicto, otro colega lo acusó de haberlo insultado llamándolo “balsudo” frente a pasajeros.
La Corte de Santiago revisó el caso y destacó que no había evidencia formal para sustentar las acusaciones de insultos o violencia verbal. Asimismo, también se señaló que la palabra «balsudo» no existe en el diccionario, pero podría estar vinculada al término chileno “balsúo”, que describe a una persona que se aprovecha de la buena voluntad de otros.
Al concluir, la Corte determinó que la sanción aplicada al taxista carecía de fundamento suficiente y anuló el castigo. Así cerró un episodio que, más allá de su seriedad, dejó perplejos a los involucrados y a los espectadores del inusual enfrentamiento.