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Cristián de la Fuente rompió el silencio sobre su infidelidad a Angélica Castro en una entrevista en México, donde ahora reside tras su separación. Aunque admite que fue un error, reveló que crecer con un padre bígamo normalizó en su mente la «doble vida»: «Mi papá estaba con mi mamá el sábado y con mi ‘tía’ el domingo», recordó.
Contó que sus vacaciones de niño se dividían entre ambas mujeres, lo que lo llevó a naturalizar relaciones paralelas: «No había culpa», afirmó. Sin embargo, reconoció el dolor que causó: «Uno comete una estupidez y piensa que no es tan terrible, pero el daño es horrendo».
De la Fuente concluyó que hoy entiende las consecuencias emocionales de sus actos. Asegura que la culpa surge cuando uno se integra mentalmente y reconoce que sus decisiones pueden herir a otros: «Por eso uno lo deja de hacer, porque hay repercusiones», reflexionó.
