La polémica que protagonizó Raquel Argandoña durante un vuelo desde Panamá a Chile, tras denunciar el robo de su reloj Rolex avaluado en $20 millones, dio un giro inesperado. Según reveló el programa Qué te lo digo, el accesorio no fue sustraído, sino olvidado en la habitación del hotel en Aruba donde la animadora se hospedó.
El periodista Sergio Rojas afirmó que el establecimiento se habría comunicado con Argandoña para informarle del hallazgo, desmintiendo así la versión de un robo en pleno avión. El registro del incidente, viralizado en redes, la muestra alterada diciendo: “¡No voy a perder 20 millones!”, antes de descender de la aeronave junto a José Miguel Viñuela.
Rojas añadió que la aerolínea involucrada estaría evaluando solicitarle una disculpa pública, ya que el episodio afectó a pasajeros y tripulación. Con esta revelación, el mediático caso deja atrás la denuncia inicial y se reduce a un simple olvido que terminó convertido en uno de los escándalos más comentados de la semana.