Martín de los Santos Lehmann, aún prófugo por la brutal agresión que dejó ciego de un ojo al conserje Guillermo Oyarzún, reapareció en Instagram con nuevos mensajes polémicos. Desde Brasil, el imputado ofreció un insólito “servicio” como influencer para pymes y compartió relatos personales que intentan justificar su conducta violenta.
En sus publicaciones, afirmó haber sido víctima de violencia en la infancia por parte de una profesora y señaló “Esa primera herida abrió la puerta a muchos otros abusos”. También aseguró estar buscando “verdad y no venganza”, e insistió en que “está negociando con respeto con la familia de don Guillermo”.
El acusado recalcó que “trabajó en Contraloría y la Fiscalía Nacional Económica”, lanzando duras críticas al sistema judicial y la prensa. Hace unas semanas había ofrecido una parcela en Pichilemu a cambio de un acuerdo extrajudicial, en lo que él define como un intento por lograr “paz” sin enfrentar una condena.